Hace unas semanas, por casualidades de la vida, vi por twitter que mi video-proyecto raruno «The White Cat Watches» había gustado a la gente de DeconstrucTeam.
Intercambiamos unas palabras al respecto y descubrí que se trataba de un jovencísimo estudio indie de videojuegos. Aviso que chorrean talento. Vi entonces que estaban en pleno crowfounding para desarrollar el remake de uno de sus juegos: «Gods will be watching».
«Wachings y Watches aparte, debo decir que esos pixeles deliciosos me cautivaron desde el primer momento. La ambientación, la atmósfera… incluso la forma en la que te vendían el crowfounding me parecieron molonas a más no poder…
Es uno de esos proyectos que te caen en gracia y a los que decides seguir la pista. Así, colaboré con mi mini-granito de arena en forma de dólares en el proceso de financiación y decidí darles toda la repercusión que mis tristes redes sociales me permitían.
Actualmente creo que queda como una semana para terminar dicho proceso de recogida de monedas gordas y la cosa no les ha ido nada mal, pero aun estás a tiempo de echarles un dolar-cable y así, el día de mañana, cuando esta gente lo pete salvajemente, podrás decir que una miniminiminiporción de su éxito fue financiada con tus créditos 🙂
Sea como sea, lo que más me gusta es que han creado (o están en ello) un producto que, para empezar, ya es capaz de inspirar a otros a generar material relacionado con su universo, pese a que, como en mi caso, apenas conozco el juego en sí (he decidido no jugar a la primera versión y reservar mi ansia al remake cañero :).
Jonathan Romero Ruiz ha creado un material delicioso.
En mi caso, ayer sufrí un ataque de «fanartismo» y pinturreé mi versión y visión de uno de los protas, el sargento Burden. ¡¡No prometo no sufrir nuevos ataques y plasmar al resto de personajes del juego!!
Nada más, echarle un ojo al proyecto y disfrutar de esta nueva sangre joven pixelada y videojueguil que va a dar que hablar sí o sí o sí o sí ya mismo.